Análisis de nivel Intermedio

por S. Nappalos

Hay una tradición en la izquierda de pensar y tomar acción sobre dos niveles de actividad; el nivel de masas y el nivel político revolucionario. Hay diferentes maneras de categorizar estos conceptos, pero son distinguidos por variados niveles de unidad y su contenido. El nivel de masas es donde individuales se unen basado en intereses comunes para tomar acción, las uniones son el ejemplo mas obvio y tradicional. El nivel político revolucionario es el nivel mas alto de unidad donde individuales toman acción basada en práctica e ideas comunes. Estos son los conceptos cuales son herramientas que nos ayudan a comprender el mundo, y mejor actuar a cambiarlo. Si hacen eso, trabajan bien, y si no conseguimos nuevas. En el nivel de realidad, esta división no es tan clara, y creo que vemos mezclas de unidad y acción en todas partes. Estos conceptos nos ayudan distinguir como revolucionarios, nos podemos relacionar a grupos sociales, y como podemos intervenir.

Por esa razón quiero proponer un tercer nivel, el nivel intermediaron, y un tesis; en los EE.UU. el nivel intermediario es el mas importante para revolucionarios. De hecho, creo que esto es cierto mas allá que los EE.UU., pero no tengo el espacio aquí par comprobarlo, y eso lo dejare a otros en otros lugares. Tomando el ejemplo del movimiento obrero, vemos uniones al nivel de masas grupadas por temas de trabajo común, y un nivel político de militantes revolucionarios con una ideología unida actuando dentro de las uniones en una manera u otra. Por dentro de las uniones puede haber una variedad de organizaciones políticas, y de individuales militantes cuales no pertenecen a organizaciones. Una organización intermediaria puede crear unidad entre trabajadores conscientes en clase dentro de su industria, trabajo, etc. La organización intermediaria no tendrá el nivel de unidad de una organización política, porque su basis es unir a militantes para práctica común cual no requiere que todos tengan la misma base ideológica o política. Como la organización de masas, si requerimos que todos miembros en una unión tengan el mismo nivel de entendimiento de clase y militancia, seriamos limitados a ser una fracción o tigre de papel.

El nivel intermediario es estratégico por el estado de organizaciones políticas y de masas en este momento. La izquierda revolucionaria ha sido aislada del la clase obrera (y otras clases oprimidas) por décadas. La izquierda origina de estudiantes y movimientos sub.-culturales cuales forman un entrenamiento par alas diferentes instituciones izquierdas burocráticas (ONG, uniones, grupos de cabildeo, partidos políticos, y secciones de la academia), o por lo menos estas instituciones son dominantes en la izquierda. La izquierda refleja una sección particular de nuestra sociedad, una que se separa de la clase obrera por su actividad, visión, y composición. Hay una inercia de dispraxia; las ideas que propugna la izquierda no reflejan su actividad. Si esto es por el bloque negro o revolucionarios trabajando a elegir la izquierda del capital, la izquierda puede ser caracterizada por su alejamiento a la clase obrera en vez de la habilidad de “actuar en su interés”.

Pero los movimientos de masas son dominados por las mismas fuerzas que dominan la izquierda, las burocracias institucionales que son integradas en el capitalismo. Casi ningún movimiento existe donde la clase obrera tiene oportunidades de liderazgo, enganchar colectivamente, y de tomar acción colectiva contra capital. Estos movimientos no tienen garantías. Trabajadores tienen sus propias ideas y lógica, cual puede liberar o puede ser reaccionario (y posibilidades entre esas). Espontaneidad y la vanguardia son las dos falladas por su base. Mientras movimientos tienen el poder de transformar la sociedad, la opuesta también puede ser verdad. La izquierda tampoco es inmuno a las mismas circunstancias que amenazan a los movimientos de masas, en hecho, la izquierda falla más. Generalmente la izquierda se queda detrás en tiempos que las masas se rebelan, y a menudo toma el rol de reprimir estos movimientos.

Históricamente, hay un silogismo en la izquierda libertaria sobre uniones que refleja la división entre los niveles de masas y políticos. Es una variación de esto:

  1. Una unión es organizada por gente para mejorar sus condiciones de trabajo
  2. Para ganar sus demandas, las uniones tienen que unir grupos bastantes grandes para ser eficaz.
  3. Si trabajadores tienen que ser anarquistas/revolucionarios/comunistas antes de formar parte,
    1. No seria necesario porque los trabajadores ya serian revolucionarios, y podían montar una revolución. La unión solamente seria una copia de una organización política.
    2. Los miembros solamente serias anarquistas en papel.

Otra variación:

  1. Uniones existen para ganar mejores condiciones

  2. Una clase obrera organizada crea hostilidad con la clase capitalista mejor apoyada y organizada

  3. Las uniones:

    1. Mantienen su militancia, y son atacadas sin moderación
      1. Son menos eficaz o no ganan sus demandas

    2. Pueden atentar colaboración entre clases, y a veces ganan demandas

      1. Esto integra uniones al capitalismo, y crea una burocracia con intereses separados de esos de los trabajadores.

      2. La unión tiene interés en mantener el capitalismo, y es reaccionaria.

Las conclusiones de este silogismo varían, pero comparten algunas cosas. Esta orientación propone una concepción no-histórica de los niveles de masas y políticos. También sugieren en algún nivel una orientación realística o normativa para organización política y de masas, en ves de una visión instrumental, donde estos conceptos son herramientas cuales reflejan la realidad pero no necesariamente una realidad directa. La idea normativa es que aunque no sean de esa manera, deben de, y debemos luchar para asegurar que la organización de masas se mantiene no-política, y que la organización política no sea de masas. Estas líneas de pensamiento nos empujan a los niveles de masas y políticos en maneras que no nos preparan para las maneras en que movimientos cambian sobre tiempo y se forman si mismos.

La historia del movimiento obrero es bastante diferente que la discusión anterior. En vez de ver claramente las divisiones entre organizaciones revolucionarias políticas y uniones de masas generales o entre uniones colaboradoras y militantes, vemos cada variación posible. Esto es común, y las discusiones anteriores atentan discutir contra mezclar de masas y políticas, diciendo que es una mezcla total que solamente trae fracaso. Es un argumento sobre la esencia de lo de masas o político, cual entonces trata de cambiar organizaciones de masas y políticas en relación a su carácter.

El problema es que estas organizaciones no son estacionarias, cambian. Pero tampoco cambian sin razón, hay movimientos distinguibles durante una lucha. Cuando una lucha empieza y la sociedad estalla en resistencia podemos ver las organizaciones de masas volverse políticas, y trabajadores volverse radicales (y a veces hay tendencias hacia fascismo). Similarmente organización política puede tomar características de masas. En puntos de resistencia baja organizaciones políticas de trabajadores encuentran difícil actuar como organización de masas, y organizaciones de masas tienen tendencias hacia dominar por colaboración entre clase y burocracia parasitica.

Aunque sea muy general para comprobar un sistema, este es un entendimiento fundamental. Eso es decir que la lucha no es estacionaria, pero cambia con el aumento y descenso de resistencia. Esto no niega que se ven radicales movimientos de masas militantes cuando no hay otras luchas (como el MST en Brasil, o el CNT bajo Franco), pero debemos esperar que el alcance de estas luchas será limitado, y necesitamos actuar en vez de esperar que crecerán paso a paso.

Como la gente se organiza cambia similarmente a esto. Eso dicho, quiero mencionar que no creo que la organización de masas o la política pueda a solas acabar con el capitalismo y crear una nueva sociedad. Los dos ejemplos de dictaduras por partido en los estados soviéticos, y el fracaso del sindicalismo en España y otras partes nos propone información sobre las limitaciones de formas de organización rígidas.

Esta época, el alejamiento de la izquierda y la lucha ha creado una obsesión abstracta con forma o contenido, otros conceptos que son herramientas. Una secta intelectual y a veces política se enfoca solamente en contenido político, en tratando de convencer, debate, ganar, o propagar ideas revolucionarias sin contra su forma o su encarnamiento en lucha. Una tendencia de activistas es enfocar en la forma, y la democracia formal, como ser intrínsicamente revolucionaria sin analizar el contenido y las ideas de gente dentro, o ni siquiera su dirección. El contenido de luchas es decisivo. Una democracia formal con una clase obrera racista puede ceder un fascismo radical democrático. Queremos ver democracia en hecho, cual no es garantizada por estructura, y una democracia con cierto contenido, contenido anarquista comunista. Esto quiere decir que debemos buscar y reforzar luchas que desarrollan ese contenido dentro de la lucha, una gran diferencia de hacer que la gente exprese ideas radicales.

Sintetizar estas dos características de organización en sociedad nos trae a enfocar al rol del nivel intermediario. Al presente, vivimos en un punto bajo de lucha en los EE.UU. Organización de masas es desplegada y localizada, o reprimida o apropiada, mientras organización política es aislada y deformada, todo mientras el capital reestructura, disciplina, y racionaliza. Dos opciones presentadas por lo común son construir movimientos de masas sin reflejar, o crear organización política. Al nivel de lucha de masas, nos vale mucho decir que organizar es difícil, y la fuerza con cual somos reprimidos por el capital es nuestra peor amenaza.

Sin embargo la potencial de capital para incorporar y utilizar represión contra una lucha de masas no es bien entendida y apreciada (especialmente porque el nivel de lucha es bajo de todos modos). En el lado político revolucionario tenemos la aislación manifestada como espontánea, insurreccionaría, o intelectual. Segundo, hay atentos de construir organización política de los movimientos de masas cuales generalmente no existen o son organizados contra organizaciones políticas. Crea una situación de la gallina y el huevo, faltamos el nivel de lucha para despertar los movimientos de masas, pero también faltamos el movimiento de masas para generar esa lucha. No es posible simplemente desear la existencia militantes de movimientos de masas, ni tampoco es responsable simplemente esperar que ocurra.

Durante puntos bajos de la lucha, el nivel intermediario presenta una alternativa. Mientras no podamos sostener organizaciones radicales de masas en todas temporadas, podemos unir los elementos más conscientes de esos movimientos con los elementos más activos de movimientos revolucionarios para asegurar continuamiento, organización, coordinación, y educación entre luchas. La organización intermediaria es la memoria, el entrenamiento, y la guardería de consciencia desarrollada por parte de la lucha, cual no es posible por dentro del vaivén de movimientos de masas, y cual tiene actividad diferente y unidad que el nivel político. Distinto de los movimientos de masas, el nivel intermediario no busca ser el vehiculo de mediación entre el capital y la clase obrera, por eso tiene la oportunidad para actuar y desarrollar en maneras que no puede el movimiento de masas.

Esta alternativa se nos presenta en práctica a organizadores. Ejemplos son esas luchas dentro de uniones establecidas para ganar democracia y hacer los trabajadores más militantes. En seguido estas luchas se forman por parte de elecciones, actividad coordinada en reuniones, y a veces acción. Para los trabajadores organizando estas acciones, hay varios retos para suponer. Primero es si hay espacio para tener reuniones donde tácticas y estrategia pueden ser discutidas, asesar el proceso de organizar, y un espacio para invitar contactos a reuniones de uno-a-uno, o de la masa. Mientras esto se puede decir de un espacio físico, también se puede decir de habilidades y materiales. Trabajadores necesitan algún nivel de cooperación para entrenarse, mantener organización sistemática, compartir lecciones resultantes de luchas, y desarrollar su visión y dirección. Esto requiere una nivel de organización cual el jefe no querrá, cual igualmente la unión que esta siendo peligrada. Si el grupo gana la lucha, la organización que los llevo hasta este punto puede ser incorporada a la burocracia existente, disolverse, o ser atacada. Pero todos los mismos problemas pueden aparecer después cuando los vientos cambian, y los trabajadores se encuentran otravez en batalla. La organización de nivel intermedio, es el espacio donde militantes tienen la coordinación, recursos, educación, y continuidad para desarrollar resistencia continua y militantes por todos estos cambios.

Considerando la marginalidad de uniones en los EE.UU. hoy en día, una experiencia más común es en una impresa sin unión. Tres ejemplos contemporáneos de la IWW iluminan el potencial de la organización de nivel intermedio. En la industria de restaurares hay niveles altos de rotación de personal, y seguridad de trabajo baja. Beneficios no existen, lealtad a empresas baja, y los trabajadores dependen en propinas por su sueldo básico mientras son divididos por esa competencia. En una variedad de contextos la IWW organizo en el sector de restaurantes. La mayoría de empresas tienen menos de 20 trabajadores, no siendo financieramente sostenibles para sindicatos tradicionales (cuales son dirigidos por empleados) para organizar. Es poco probable que un sindicato pueda organizar bastante poder para ganar un contrato, sostener la membresía requerida para mantener el contrato, y mantener un sindicato activo bajo esas condiciones. Por consiguiente una estrategia se desarrollo en la IWW en varias locaciones dentro la industria de comida. La organización seria orientada a luchar por ganancias particulares usando acción directa, y generalmente clandestino, manteniendo la unión secreta del jefe. Varios éxitos resultaron de la estrategia, en contrasto a pruebas con trabajadores usando una estrategia de contratos en empresas pequeñas. Pero la trayectoria de este tipo de organización tenia limites. Talleres calientes producían uno o dos líderes politizados pero cuando pasó la queja específica el taller enfrió y el negocio regresó al normal. Muchas veces trabajadores renunciarían por todos modos y la dirección hizo lo mismo en unos casos. Dónde el sindicato puede integrar la dirección y convencerles de encargarse la lucha a otros talleres desarrolló una red industrial de militantes. En una ciudad esto desarrolló a una organización permanente afuera de la IWW, aunque organizado con militantes de la IWW y ganó varios éxitos, integrando más trabajadores a su organización como militantes.

Temprano en los anos 2000, la IWW en Portland tuvo una serie de éxitos en empresas sin fines lucrativos, a la larga ganaron contratos para trabajadores en empresas pequeñas. Mientras estas empresas se mantienen organizadas en nombre, la rama de unión industrial que se fundió de estas empresas se lleno de trabajadores sociales no organizados. Membresía creció a 200 por un tiempo. Con la estrategia siendo primariamente ganar contratos durante tiempos de recortes, esa estrategia para organizar uniones radicales en empresas chicas, el proyecto fallo. Durante la campana, una de las empresas fue amenazada con un recorte de masas del condado, profundamente arriesgando las vidas de los trabajadores. Por la existencia de la rama industrial, pudieron organizar una sección de la industria de servicios sociales para tomar acción en las vistas del condado. Hubo piquetes en las vistas, y el condado reconsidero. Trabajadores de toda la industria se unieron para una demostración pública de las contradicciones del capital en sus estrategias destrozadas, noticias cuales este condado no estaba listo de recibir. El condado instantemente restableció financiamiento. Mientras esta fue experiencia transitoria, demostró un alternativo al modelo de organizar por contratos. Al fin, la empresa contratada no pudo crecer afuera de esa actividad como movimiento defensivo, y crecer sus ganancias y influencia, pero sirvió como un ejemplo para organizadores que participaron y tomaron lecciones de esa lucha para una estrategia diferente.

En el verano de 2004 una huelga salvaje ocurrió en los puertos de los EE.UU., parando el transporte de materiales masivas. Estas huelgas fueron organizadas por muchos grupos pequeños de camioneros a través del país, ligados débilmente, comunicándose por texto, teléfonos Nextel, radio comunitaria, y el Internet. Los trabajadores eran hostiles a los sindicatos por el hecho de intentar a hacer negocios “cariñosos” con el empleador. Esta lucha simplemente era un altercado particularmente grande de luchas similares que estaban ocurriendo sobre mas de 15 anos desde que rompieron la unión y des-regularon los puertos, y hubieron cambios en condiciones de trabajo y la clase social de los camioneros. Durante ese tiempo, los camioneros aprendieron como luchar y ganar sin intermediarios, y podían superar por periodos la competición Inter-étnica para presentar una visión de organización para toda la clase. El problema que enfrentaban era coordinación a través de estos pequeños grupos, sosteniendo sus ganancias, y hacer su organización más sistemática. Las huelgas de 2004 no duraron por estos problemas. En ese tiempo, una organización de masas era posible, aunque la fundación para esa transición no estaba establecida. Antes y después también era posible una organización de nivel intermedio para crear mas apoyo para esas luchas, y sostener las victorias mientras construye liderazgo, conexiones, y organización.